Julía Varela: ''Eurovisión es un Festival de emociones. Eso son las canciones: emociones.''

 

1. ¿Cómo ha sido tu experiencia como comentarista de España en Eurovisión?

Fantástica. Desde el punto de vista profesional, ha supuesto un reto enorme! Mucho trabajo de indagación, documentación y ensayos. Sin embargo, es un esfuerzo bien recompensado porque, al fin y al cabo, Eurovisión es un festival de emociones. Eso son las canciones: emociones. Las del artista, las de la audiencia y también las de los periodistas que cubren el evento. Un cúmulo de emociones que se concentran y explotan para dar lugar al festival musical más importante de la televisión. Por eso, desde el plano personal, he disfrutado mucho de la música, de la gente, de la dinámica del evento en general. Además, me he convencido del todo de lo moderno que es este festival. Cualquier idea nostálgica o kistch ha quedado descartada. Eurovisión es cool. 

 

2. ¿Te gustó trabajar con José María Iñigo?

Sí! Es un lujo pasar tanto tiempo al lado de un profesional como José María, con tanta experiencia en la televisión y, en concreto, en programas musicales. He aprendido escuchándole, tomando nota de su manera de narrar, me ha dado consejos y me ha cuidado mucho. Es un sabio, un crack de la tele, tiene una voz mítica que llena el espacio y, por encima de todo, una excelente persona. 

 

3. ¿Te gusto como lo hizo Edurne en Eurovisión?

Creo que Edurne estuvo perfecta, clavó la puesta en escena y la canción. Tiene una bonita voz, muy dulce, una presencia imponente y, sobre todo, es una artista trabajadora. Puso mucha garra de su parte, pulió la parte vocal y coreográfica todo lo posible para crear una historia emotiva en el escenario que sorprendiese al público. 

 

4. ¿Se merecía ese puesto 21º?

La verdad es que creí que estaríamos en el Top10! Pienso que algunos países fueron un tanto rácanos en sus puntuaciones. Reconozco que había canciones y voces con mucho nivel, algunas de ellas mejores que la propuesta española. Pero también había otras que no merecían puestos más elevados que el nuestro. De todas formas, en eso consiste esta competición. Ganar Eurovisión es complejo, no hay fórmula exacta, son 40 países compitiendo al máximo, hay filias y fobias históricas por parte de los participantes...no es fácil triunfar! Lo que sí se lleva Edurne es la gran repercusión de un festival que solo en España vieron casi 8 millones de personas en algún momento de la noche. Es un escaparate impagable para cualquier artista, con independencia de la posición final. 

 

5. Suecia fue la ganadora del certamen, ¿crees que se lo merecían?

Suecia era una de las favoritas y con razón: Mans Zelmerlow interpretaba el tema con mucha fuerza, su telegenia es innegable, la canción tenía un punto dance y efusivo que hacía saltar al público, la proyección (el mapping con el que Mans interactuaba) es innovador en este festival...Y el mensaje del tema, la alusión a la heroicidad de cualquier persona, también es bueno. Sí, éxito merecido de Suecia. 

 

6. ¿Algún otro país te gusto?

En el terreno de las baladas, destaco la de Estonia, Goodbye to Yesterday, con su intercambio de miradas desgarrador y esa melodía que acababa resultando familiar y agradable, a pesar de la tristeza de la que hablaba en su letra. Pero, para mi gusto, fue superada por A Monster Like Me, el tema de Morland y Debrah Scarlett. Es sosfisticado, elegante, un poco inquietante y sombrío al inicio, pero de repente estalla con una luz increíble. La puesta en escena tan minimalista, esa especie de juego miedoso entre ambos...me parece una canción sorprendente y, de hecho, Morland fue premiado como mejor compositor en esta edición eurovisiva. En el terreno más bailable, además del ganador Heroes, siento especial devoción por la voz de Guy Sebastian, por ese timbre tan funky y por su manera de moverse. Chapeau!

 

7. ¿Qué actuaciones españolas en Eurovisión recuerdas más?

Mi recuerdos claros de Eurovisión comienzan en los años 90, con Azúcar Moreno y Sergio Dalma. A las primeras las imitaba frente al espejo del baño, el segundo creo que me sedujo, a mí y a toda Europa, con su Bailar pegados. Recuerdo a Serafín Zubiri frente al piano y todavía canto el Vuelve Conmigo de Anabel Conde y el Hombres de Eva Santamaría. Pero con lo que más disfruto es revisitando en YouTube las actuaciones de Massiel, Salomé, Betty Missiego, Karina, Mocedades...Buenas canciones!Uy, y recuerdo a la pobre Lidia...no comment. 

 

8. ¿A que artista llevarías a Eurovisión? (algún nombre)

Buscaría una gran voz. Eso es lo primero. Eurovisión es el Festival de la Canción y lo que más se valora es la calidad vocal. Creo que propondría a un artista muy conocido y popular, con cierta veteranía, tipo Marta Sánchez, Chenoa o David Bisbal. O que Ruth Lorenzo y Pastora Soler repitan! También tantearía terrenos musicales más independientes porque quizás alguna banda más electro podría encajar. Otro asunto es que estuviesen dispuestos! Y me gustaría que, en un futuro, la canción española se interpretase en inglés, porque es, de momento, el lenguaje que mejor funciona en esta competición.  

 

9. Y finalmente, ¿repetirías como comentarista en el Festival?

Claro! Ojalá. Aquí estaré si me necesitan.

 

Gracias. Un beso. Puedes dar un saludo a nuestros seguidores si quieres. 

Un beso grande y repleto de música para los lectores de El Eurovisivo y, en general, para los eurofans que me han acogido tan bien, me han nutrido con su aportaciones e ideas y me han animado muchísimo. Lo cierto es que me han transmitido su amor por el festival vía redes sociales, llamadas, conversaciones informales y entrevistas. Esto sin vosotros no funciona! Que quede claro. Gracias por la entrevista, equipo de El Eurovisivo. Otro beso final!